El ladron juzga por su condición...

Así dice el refrán. Es bien sabido que el dictador cubano Fulgencio Batista luego de ver sus intentos por continuar en el poder frustrados por el creciente respaldo de "los barbudos" de Fidel Castro en Sierra Maestra toma un vuelo y se refugia en Santo Domingo, donde es bien recibido por Rafael L. Trujillo, su homologo dictador pero al cuadrado. Trujillo no ve la huida de Batista como honorable y piensa entre otras cosas que debió combatir hasta el final y morir de ser necesario en vez de huir como un cobarde, como terminaría siendo asesinado el propio Trujillo, ajusticiado con arma en mano en 1961.

Batista con un historial de crímenes y asesinatos cometidos en su mandato llega a la ciudad y de inmediato es exigido por Trujillo que salde un monto de una deuda contraída en dólares que éste le había facilitado para la compra de armas contra los insurgentes, Batista cree poder zafarse de Trujillo argumentado que esa deuda era del Estado Cubano y que él no cargaba con dicha suma. Trujillo ni tonto ni perezoso no dubita y lo manda a trancar, lo hace encerrar en prisión hasta que el dinero aparezca, recordándonos tiempos romanos donde el patrimonio del deudor y su persona no se distinguían. Batista ahora preso no por las razones debidas ante lo criminal que fue, pero encarcelado al fin, se agencia el dinero robado del tesoro cubano unos míseros millones para lo que realmente se había llevado y a pagar en los términos expuestos por Trujillo la deuda entre ambos. Trujillo demostró con esto que no tenía amigos sino intereses (como diría un secretario de Estado norteamericano sobre su país) y que lejos estaba de pendejo y cerca del demonio. De Batista sabemos que en cuanto Trujillo le dió un respiro siguió su cobarde huida hasta que lo alcanzó la guadaña en 1973.

Moraleja para Batista: A todos algún día nos toca rendir cuentas, o como diría Tego Calderón "A cada abusador le llega su calderona"....de encontrar otra moraleja le permitimos la de su elección.

T.

Habia olvidado mi gusto por la miel

Breves..

Sigo pensando que este debe ser uno de los países que peor trata a sus peatones y por ende a los humildes, aquí el que anda a pie no es gente, nadie puede cruzar tranquilo porque no se respetan los semáforos y en caso de que se respeten siempre hay la posibilidad de que alguien doble a la derecha estando en su debido derecho de conductor, se estacionan sobre las aceras en busca de la comodidad(no lo hago, caso "pícalo" no aplica), y los perjudicados vuelvo y repito son los humildes porque son lo que andan como Fernando "un ratito a pie y el otro andando" y debemos buscar el cambio en esta rama de la cultura automovilística y de confort porque al fin y al cabo un día mas que otro a todos nos toca o tocará ir como Fernando.

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Por otro lado un tema que he tratado de compartir con mis amigos, exceptuando Milán que no se si considerarlo mi amigo porque me llamo el otro día para que juntos asistiésemos a un "Spa" y a darnos masajes y todavía no se en que categoría incluir ese comentario ni a él, un tema que siempre me recuerdo en la ducha cuando tomo el shampoo que nunca he comprado y procedo a leer que el destino que es procurado dice para cabello seco y rebelde, porque estas líneas siempre de estos shampoo son muy cómicos, los sinónimos usados en este tipo de líquidos son dignos de estudios, pero la parte de rebelde me ha llamado la atención con frecuencia, mi cabello yo no le llamaría rebelde sino revolucionario o quizás incongruente, insurrecto, sublevado, alborotador, roquizquierda como mi personalidad en momentos, o quizás como George Harrison cuando le preguntaron como llamaría al nuevo estilo de cabello de los Beatles debería llamarle sólo "Arthur"..

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Contento salgo del Palacio de Justicia (de la Feria) cuando caminando oigo desde una camioneta alguien que exclama como recuerdo mas o menos "a mi en Bonao me decían el lápiz, tu sabes por que? porque con el lápiz es que tu aprendes y conmigo se aprende mas que con los corales..." Yo, sonriendo giro la cara hacia la camioneta con lo que visibilizo un letrero que decía DIRECCION DE PRISIONES y una persona parlanchín esposada, por lo que procedo acelerar un poco mi paso.

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No creo que el Profesor tuviese conocimiento cuando en aquel pruebín de recuperación, en uno de los ejercicios que obtuve sólo las respuestas por métodos no muy fidedignos de un buen estudiante y procedí a ponerle "Procedimiento en la otra hoja", la otra hoja claro era inexistente, ya que no tenía ni una pizca de idea como se realizase. Un poco de astucia, pero no creo que se imaginase el que fuera intencional y fruto de una mente que va mas allá cuando los exámenes la tratan de nublar.

"Yo no doy un golpe ni de karate
Paso mas trabajo que un forro de catre
No es que sea vago es que tengo paciencia
Estoy esperando mi residencia...”

T.